El chef español con más estrellas Michelin respalda el proyecto de la empresa líder en ventas de trufa negra.
Martín Berasategui toca el cielo con las manos gracias a las 12 estrellas que la guía Michelin le ha otorgado a lo largo de su trayectoria profesional.
El chef ha batido todos los récords de la Guía Roja con la reciente incorporación al palmarés del Ola de Bilbao y el Fifty Seconds de Lisboa, lo que le ha convertido en el cocinero español más laureado por la publicación gala y el único con dos restaurantes triestrellados.
Las nuevas distinciones se añaden a las diez que ya tenía el donostiarra: tres en su sede principal del municipio guipuzcoano de Lasarte, otras tres en el Lasarte de Barcelona, dos en Abama (Tenerife), una en el restaurante Eme Be Garrote (San Sebastián) y una más en el Oria (Barcelona).
Este prestigio internacional es el que atrajo a la empresa Laumont, líder de venta de trufas en España, para ficharlo como asesor gastronómico, ya que solo un galáctico de los fogones puede respaldar un proyecto protagonizado por la trufa negra, el diamante de la cocina.
Martín Berasategui y Laumont comparten la pasión por el trabajo bien hecho y el compromiso con la excelencia. Son estas cualidades las que impulsaron al chef a unirse al equipo de una empresa que lleva más de 40 años seleccionando y limpiando a mano las mejores trufas para satisfacer a sus clientes.
La trufa negra –cuyo nombre científico es Tuber Melanosporum– es una de las variedades de hongos más valorados por la alta cocina. Su potente aroma y su intenso sabor hacen de este producto un excelente manjar codiciado por los paladares más selectos.
La también conocida como trufa negra del Périgord, se recolecta de noviembre a marzo en bosques de encina situados entre los 500 y 1.000 metros de altura. Este producto no admite ningún tipo de cocción por lo que se utiliza básicamente para decorar y otorgar un característico sabor a los platos de pasta, las ensaladas, etc.
